sábado, 14 de diciembre de 2013

LAS MEJORES HIPOTECAS

Las mejores hipotecas para terminar el año.

Actualmente y con el crédito en mínimos históricos, es muy complicado hacer una selección de los mejores préstamos hipotecarios de fin del 2103.



En primer lugar por la dificultad de marcar el criterio de riesgo de cada banco en cuanto al perfil que puede acceder a un tipo de hipoteca u otro. Además de exigir tener un importe ahorrado elevado, si nos fijamos en la capacidad de ahorro actual de una familia media, que es de más del 30% del precio de compra-venta en el caso de las mejores hipotecas (para pagar los gastos de la operación y el 20% de la compra), la estabilidad en el empleo es fundamental.

Un funcionario de carrera que cumpla con las exigencias de ahorro comentadas y sin endeudamiento previo alguno, probablemente pueda acceder a diferenciales cercanos al punto. Sin embargo, un autónomo con importantes ahorros, por comentar un tipo de trabajo poco valorado en las oficinas bancarias, tal vez tenga que presentar avalistas y dobles garantías inmobiliarias, para que se estudie su caso.

Por otra parte, la opacidad hipotecaria de la banca actual es muy importante. Procuran no tener condiciones estandarizadas en su oferta de préstamos, aduciendo que se calculan en base al perfil económico de cada cliente. Sin embargo, otras razones pueden ser la poca intensidad comercializadora de la financiación con garantía real actual o la poca eficacia de anunciar diferenciales que superan los tres puntos básicos.

Además, las hipotecas de pisos de bancos, reservadas a los inmuebles de la propiedad de las entidades financieras, son una competencia directa a las hipotecas para adquirir inmuebles a particulares y promotores. Dado que estas hipotecas para adquirir las casas en manos de los bancos son más baratas, no interesa anunciar las condiciones de ambos tipos, para evitar críticas más o menos justificadas a esta disparidad interesada.

Además cada una de las hipotecas que nos ofrece la banca tiene un número muy elevado de productos vinculados, como los seguros, gasto mínimo de tarjeta o contratación de determinados productos de ahorro (planes de pensiones o fondos, por ejemplo) que aumentan el coste final de la hipoteca sin figurar en la TAE que usamos para comparar.

Por otra parte hay que analizar bien las comisiones, siendo la de apertura la más onerosa en el momento de la contratación. Políticas de comisiones cero o ausencia de productos vinculados obligatorios son políticas comerciales muy a tener en cuenta a la hora de elegir un banco u otro.